Los Rojillos culminaron en el séptimo lugar de la tabla de posiciones y ganaron, dentro del campo de disputa, un boleto hacia la próxima edición de la Conference League. Si bien todo era fiesta en Pamplona, aún restaba que UEFA se expida por un caso sucedidó varios años atrás. Y, al hacerlo, dejaría sin competencia internacional a los dirigidos por Jagoba Arrasate.
«El Club Atlético Osasuna ha tenido conocimiento, en la tarde de hoy, de las conclusiones del informe elaborado por los inspectores del Comité de Control, Ética y Disciplina de la UEFA» arrancó el documento publicado por la institución damnificada que luego amplió.
Los Rojillos sostuvieron: «En dicho informe los inspectores declaran la “inelegibilidad del club para participar en la UEFA Conference League 2023-2024”, negándole de esta forma el derecho a participar en competiciones europeas que se ha ganado de forma justa en el campo».
En Pamplona mostraron furia por una sanción de algo ocurrido hace nueve años y, así también, no se olvidaron que Barcelona podría también estar implicado en una exclusión de Champions League aunque allí no se expidieron contra el Blaugrana. Eso generó unas fuertes líneas ante el ente máximo de Europa.
«Fuerte con los débiles y débil con los fuertes» afirman los Rojillos que además sostuvieron: «Con esta decisión, la UEFA pretende castigar nuevamente a Osasuna en la figura de sus actuales gestores, que son precisamente quienes presentaron una denuncia en el juzgado dando comienzo al procedimiento judicial para recuperar el dinero ilícitamente sustraído de las cuentas de la entidad y restaurar su buen nombre».
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