El elenco de Sebastián Beccacece rindió otro examen y aprobó en esta Copa Libertadores. Después de la derrota en Avellaneda a mediados de mes, el conjunto de Avellaneda ganó en Perú y ahora lo hizo en Uruguay para clasificar a octavos de final aún con serias chances de culminar como líder de su grupo. La Academia se impuso por 2 a 1 sobre el Bolso en el Gran Parque Central con goles de Nicolás Reniero y Héctor Fértoli.
Nacional, ya clasificado, necesitaba sumar al menos un punto en Montevideo para asegurarse el primer puesto que le diese algo de tranquilidad de cara al rival que le tocaría en ronda de dieciséis. Racing, con la unidad, se aseguraba el pasaje a la siguiente instancia pero sabía que no podía ser mezquino y conformista si realmente buscaba revalidar sus aspiraciones al título.
El pleito fue trabado. La visita volvió a presionar en la salida y gracias a ello logró la apertura del tanteador cuando apenas había transcurrido el primer cuarto de hora. Emiliano Martínez, en defensa, dio un pase en falso que fue interceptado por Reniero. El Príncipe pisó el área grande, sacó un remate cruzado, y batió la resistencia de Sergio Rochet para poner en ventaja a los argentinos del otro lado del Río de La Plata.
Lo parejo del pleito se vio en las pocas ocasiones claras y en el reparto en ambas áreas. Nacional pudo empatarlo en una gran corrida de Santiago Rodríguez que atoraron muy bien Gabriel Arias y Nery Domínguez. Pero Racing, que era levemente superior, contaba con situaciones para aumentar la ventaja como un cabezazo de Fértoli que cer fue cerca el palo izquierdo, un tiro libre de Alexis Soto que corrió la misma suerte, y un remate de Reniero que Rochet mandó al córner volcándose justamente contra ese mismo parante.
La irónica «famosa suerte» de la Academia volvió a decir presente una vez más en este 2020 cuando arrancaba la complementaria. Si bien el Tricolor salió con otro ímpetu a disputar los 45 minutos finales, el tanto del empate llegó casi de casualidad cuando saltaron a cabecear Thiago Vecino y Soto. El ex Dock Sud y Banfield, perdió de vista la pelota que impactó en su cráneo, descolocó al guardameta de la Selección de Chile, y con Arias desencajado, llegó la parda del dueño de casa.
Después del golpe, la visita tardó en reaccionar, y cuando volvió a calentar motores se reencontró con ese equipo con sed de gloria. Augusto Solari tuvo dos chances, un derechazo desde afuera del área que se fue cerca del palo izquierdo, y otra que terminó encontrando el guardameta local. Sin embargo, el rumbo del encuentro se iba a torcer defintivamente cuando, a los 28 minutos, Rochet embistió de manera innecesaria e infantil a Sigali en un centro y, José Méndez, no tuvo más remedio que sancionar la pena máxima.
Fértoli, desde los doce pasos, la colgó de un ángulo con firmeza para que la Academia volviese a estar en ventaja e iguale al Bolso en la cima del grupo F. Más allá de eso, los argentinos siguieron yendo al frente incluso hasta poniendo en riesgo la victoria. El surgido de Platense, Gonzalo Bergessio, estuvo cerca de cumplir con la ley del ex a diez del final pero la mandó afuera. También pudo igualar el otrora Banfield, Sebastián Fernández, aunque, al igual que «Lavandina», careció de puntería.
La contienda, que se puso áspera, se plagó de roces, y por momentos hacía parecer aquellas viejas noches de competencia internacional, terminó siendo para Racing que se ilusiona. Los de Beccacece rindieron otro examen, derrotaron por 2 a 1 a Nacional, aprobaron y en un par de semanas buscarán ser los líderes de su clase para soñar con el ansiado título de la Copa Libertadores de América.
