Huracán no pudo romper el cero ante Unión, que mantuvo corta las riendas del partido y terminó manejándolo a su placer tras quedarse con diez por la expulsión de Esquivel. Al Globo le faltó ambición, pese a que Sebastián Moyano se lució atajando tres pelotas de gol.
Duelo de dos con necesidad de puntos en Parque Patricios. Tras caer ante Lanús Huracán volvía a presentarse en el Palacio buscando mantener la buena imagen que dejó en aquel partido pero buscando lo que más necesita, un triunfo.
Por su parte el Tatengue llegaba de lograr su primera victoria en gran goleada a San Lorenzo.
El partido pudo tomar un rumbo diferente en pocos segundos, Cristaldo levantó un gran centro para Merolla y el cabezazo del central encontró una fantástica reacción de Moyano, devolviendo la pelota sobre la línea de gol.
Ambos propusieron un esquema similar, buscando ser elásticos por las bandas, pero con poco volumen en el mediocampo y eso generó un partido de pocas conexiones. Huracán tuvo el empuje y Unión supo leer espacios, pero ninguno de los dos terminó aprovechando sus virtudes en más situaciones concretas de gol.
Tras un primer tiempo de vuelo bajo el Globo intentó imponerse en el complemento, probando nuevamente la capacidad de Moyano con un buen tiro largo de Cristaldo que el uno Tatengue desactivó en impecable respuesta.
Unión tuvo presencia en el campo rival, pese a la falta de situaciones nítidas, pero contó con su bala de plata con el incansable Federico Vera rompiendo en posición de wing y el centro atrás que Fernando Márquez conectó ante una muy buena maniobra de Marcos Díaz.
Huracán tuvo la mejor de su noche, y del partido en general, con el tiro libre que Cristaldo cruzó a posición de Jonás Acevedo, el ex Quilmes conectó en soledad con potente zurdazo que Sebastián Moyano sacó literalmente con la cara. Tremenda respuesta del uno para mantener el cero.
A poco menos de veinte minutos para cerrar el duelo Unión se quedó por la correcta expulsión de Lucas Esquivel, quien entró muy fuerte contra Quílez. Con diez el Tatengue puso el pecho y tuvo la actitud suficiente para dejar correr los minutos ante cierta pasividad local.
Unión hizo todo lento, todo anunciado. Huracán no supo cómo aprovechar la diferencia, y los cambios de Kudelka no modificaron la ecuación. Sin grandes emociones y con el Globo lejos del arco de Moyano cerró la noche en Parque Patricios.
El empate no conformó a ninguno pero sentó mejor en Unión, que se apoyó en su arquero y en el coraje de sus futbolistas para suplir el hombre de menos.
Huracán no gana desde la primera fecha, pero esta vez dejó la sensación de dar un paso atrás en el rendimiento.
