El Rossoneri recuperó, al menos provisoriamente, el liderazgo de la elite italiana. El 2 a 0 sobre la Vecchia Signora en el Giuseppe Meazza le permitió a los de Stefano Pioli acomodarse en lo más alto del torneo junto a Napoli y Atalanta que completarán la fecha en la noche del domingo.
La jornada en Lombardía tuvo un merecido ganador. Milan fue el único que generó peligro, que coqueteó con las redes opuestas, y que terminó complicando a una Juventus que, de terminarse hoy mismo la Serie A, no estaría siquiera en puestos de Conference League.
Parecía que era otra noche desafortunada para el campeón reinante porque a los 20 minutos, Rafael Leão intentó de arremetida tras un córner de Sandro Tonali, y el palo derecho le negó el grito. Cuando iban 33, el portugués buscó revancha con un zapatazo y fue el parante izquierdo el que se opuso al festejo del lusitano.
El dominio del Milan necesitaba un gol. Probaba también Ismael Bennacer con un tiro que se iba alto. Y el premio para los de Pioli llegó en la jugada previa al entretiempo cuando Olivier Giroud enganchó de volea un tiro de esquina desde la izquierda. La pelota dio en el pecho de Fikayo Tomori y este, de mediavuelta, no perdonó a la Juventus.
Con toda la Vecchia Signora adelantando líneas en la segunda parte, el que aprovechó un error de ellos fue el dueño de casa. Dusan Vlahovic falló en un pase, Brahím Díaz interceptó el esférico, y el resto ha sido una maravilla. El español corrió con esférico dominado, dejó plantado a Leonardo Bonucci, y después de casi 50 metros definió ante Wojciech Szczesny.
Juventus dejó en claro que fuera de Turín dejó muchísimos puntos en el camino como para pelear por el título en esta Serie A. El que festejó en Lombardía ha sido este Milan que, con el merecido 2 a 0, no sólo recuperó el brillo de campeón sino que, al menos por un ratito, volvió a la cima del campeonato junto a Napoli y Atalanta.
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