El Tallarín se alejaba de la pelea por el campeonato por dos errores, uno muy grosero de su arquero, y no le encontraba la vuelta al partido en Libertad. Sin embargo, de tanto ir, se encontró con el merecido triunfo en tiempo de descuento y derrotó al Funebrero por 3 a 2 para quedar provisoriamente en lo más alto del campeonato junto a San Telmo.
Fue un verdadero partidazo. En verdad porque Ferrocarril Midland, con muy poco fútbol preo mucha entrega, puso contra las cuerdas a uno de los candidatos que tan sólo venía de sumar un punto de los últimos nueve en juego donde perdió el liderazgo del torneo. Pero también tuvo su mérito Talleres de Remedios de Escalada que generó más de diez ocasiones netas de gol y recién tuvo su premio sobre el final de la contienda.
Todo arrancó con una pifia de Alejandro Granero, fuera del área, que derivó en la primera conquista del conjunto local. Con todo el arco a su merced, Jorge González no falló y estampó el 1 a 0 aprovechando tamaño regalo que gestionó el guardameta visitante. Sin embargo el dueño de la pelota y el que apostaba en ofensiva era la escuadra de Cristian Aldirico que rápidamente logró igualar las acciones por intermedio de Mariano Romero, quien capitalizó un rebote de Manuel Peralta Salinas, y quemó las redes para clavar el 1 a 1 cuando apenas había pasado un cuarto de hora.
Siguió manejando los hilos Talleres. Jonathan Recchia desde afuera del área obligó a una espectacular volada del arquero, y más tarde Marcos Giménez también hizo brillar al uno de Midland. A los 34 Romero pudo ampliar para los de Escalada pero dilapidó un mano a mano por encima del horizontal. Y mientras todo era del Rojo, Luis Funes cometió un penal que le dio la chance a los de Gustavo Di Giuli, de volver a ponerse arriba en el tanteador. El experto Guillermo Almada Flores no titubeó y acomodó el esférico a la derecha de Granero que viajó hacia el otro palo para irse al descanso arriba por 2 a 1.
El Tallarín tuvo toda la complementaria para revertir un score adverso que ellos mismos permitieron. Calidad y peso ofensivo no faltó pero chocaron constantemente con un inmenso Peralta Salinas que se tapó todo. Hasta el central, Enzo Baglivo, tuvo su chance de convertir pero no pudo hacerlo. Y recién cuando Aldirico movió el banco, la suerte cambió para el actual líder de la Primera C. Porque en la primera pelota que tocó Eduardo Berón la mandó adentro y le puso suspenso al juego con el 2 a 2 y a falta de 26 minutos para el final.
No obstante, la visita se fue quedando sin fuerza e incluso casi se lo lleva el Funebrero con un disparo cruzado de Nahuel Chacón que se fue besando el poste derecho de Granero. Parecía que la escuadra de Remedios de Escalada se iría con otro encuentro sin ganar pero, a los 45, Iván Portillo devolvió gentilezas regalando una pelota en el fondo que aprovechó Berón y, con el arco completamente desguarnecido, sentenció el 3 a 2 con el que el Rojo se trepó a lo más alto del campeonato.
Ferrocarril Midland, que se caracterizó esta temporada por amargar a los candidatos, se quedó increíblemente con las manos vacías. Talleres la pasó mal porque erró mucho, que es humano, y perdonó demasiado. Aunque sí todo eso valieron tres puntos, el triunfo para el Tallarín fue divino.
