Apenas culminó el encuentro, mientras las Águilas Blancas esperaban con ansias el final de México y Arabia Saudita, comenzaron los saludos entre los jugadores de ambos equipos. El momento clave fue cuando Lionel Messi y Robert Lewandowski se cruzaron y conversaron a boca tapada.

«Me enseñaron que todo lo que pasa adentro de la canch, no va a salir algo de la intimidad» sostuvo el jugador del PSG cuando le preguntaron en la zona mixta por esa plática con el delantero del Barcelona.

Más allá de todo tipo de sospechas, e incluso de algún que otro pequeño cortocircuito que hayan tenido a la hora de entrega de algún premio, los capitanes de ambos equipos hablaron sin problemas y el fútbol pudo disfrutarlos por un rato juntos. Entre ambos cosechan un poco más de 1400 goles entre clubes y selecciones.

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