Terminada la temporada 2021/22 de Ligue 1, la única gran sonrisa que sacó Lionel Andrés Messi ha sido el título obtenido casi de manera obligatoria con Paris Saint Germain. En su primera incursión en suelo francés, el astro argentino fue de menor a mayor, pasó de resistido a adorado, y todo ello a pesar que sus números arrojaron aspectos positivos y negativos respecto a su estadía en Barcelona.
La única, y última vez que tuvo un promedio de gol de 0,32 por partido, fue en el campeonato 2005/06 con el Blaugrana. En aquella oportunidad, anotó seis goles en 17 partidos de La Liga y sus números fueron bajos en Champions League. Durante el presente torneo también clavó media docena en la elite francesa aunque jugó 26 contiendas. Sus valores crecieron cuando tuvo certámenes internacionales.
El total de 11 goles en la temporada de PSG fue el registro más bajo de su última década y media. De hecho, el año pasado se fue de Barcelona con 38 gritos en todo el torneo. Eso sí, en Ligue 1 volvió a mejorar en asistencias ya que con el elenco Culé había provisto 12 pases claves mientras que, bajo el mando de Mauricio Pochettino, registró catorce.
Lo bueno también de Messi ha sido su vigencia en Champions League. Por competencia europea venía con bajos valores en Barcelona puesto a que en 2019/20 hizo tres, en la siguiente cinco, y ahora en París Saint Germian también convirtió en cinco ocasiones. Eso sí, por primera vez en los últimos ocho años, no dio asistencias durante el campeonato por excelencia de los clubes europeos.
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