El Lujanero empató 1 a 1 en la Barranca con Argentino de Quilmes pero, sin lugar a dudas, ese punto fue un premio muy grande para los de Osvaldo Ruggero. Con la parda, el elenco de la Basílica se aferró a la cima del campeonato junto a Defensores Unidos de Zárate y su volante central, Joaquín Marcos, confesó que por cómo se dio el partido la unidad no es para nada despreciable. Así también, el ex hombre de Fénix, auguró que ojalá sea la suerte necesaria para lograr el ascenso a la Primera B Metropolitana quien ayudó a Luján a llevarse algo de la casa del Mate.
Vermouth Deportivo: Punteros igual pero por ahí con el saboragridulce del empate. ¿Mereció ser parda o tal vez derrota?
Joaquín Marcos: Sí, fue un partido muy duro. En el primer tiempo tuvimos un buen primer tiempo y salimos en ventaja. En el segundo tiempo ellos tuvieron seis o siete situaciones muy claras que no la pudieron meter. Justo en la última jugada nos meten el gol y por ahí te queda esa amargura de que era la última jugada, que lo podías haber aguantado un poco más. Ellos se merecían el empate mínimamente.
VD: CADU tampoco pudo ganar así que son punteros con ellos, ¿cómo lo ves al empate entonces?
JM: No, sabemos que es un rival muy duro, que la cancha esta es jodida. Sacar un punto de acá no está nada mal y más por cómo se dio el resultado.
VD: ¿Cómo viste el campo de juego?
JM: Sí, se nota que lo están trabajando. A algunos jugadores que tenemos buen pie se nos complicaba un poco jugar pero bueno, estaba mala para los dos, así que no hay excusa de nada.
VD: ¿Les está pesando la responsabilidad de mantenerse en la cima? La pregunta es porque tal vez no se está viendo al Luján que supo verse…
JM: Sí, lo que pasa es que es una categoría muy dura. Por ahí los rivales te hacen los partidos muy difíciles, muy friccionados y se nota. Los jugadores que tienen que jugar les cuesta un poco más y por ahí estos dos o tres partidos no tuvimos juego pero se nos venían dando los resultados.
VD: ¿No perdieron porque Luján tiene la suerte de campeón?
JM: Ojalá que sea la suerte de campeón.
