La última categoría del fútbol argentino tiene resuelto el ganador del premio mayor, Victoriano Arenas, que se coronó campeón en la fecha 27 tras derrotar 2-0 a General Lamadrid, en condición de visitante, con goles de Matías Coselli y Pablo Villareal. Sin embargo, el acompañante del CAVA para disputar la próxima temporada en la cuarta división es incógnita. Claro está que el torneo continúa y que aún restan dos jornadas para la finalización. Pero ayer por la tarde, en el estadio José María Moraños, Lugano se topó ante un duro rival, Liniers, y perdió 5-0. Damián Galván, en dos oportunidades, Santiago Szerdi, Jorge Rosas Quintero y Hugo Pérez fueron los goleadores del equipo dirigido por César Aguirre, que terminó con dos jugadores más por las expulsiones de Lucas Bazán y Elías Fernández.
Las estadísticas en la D marcan que el CAVA, hasta el día de hoy, es el segundo equipo más eficaz del país con el 70,24 %, detrás de Boca Juniors (73,61). Sin embargo al reciente poseedor de una de las plazas disponibles para jugar en la C, hay ocho clubes que tienen la ilusión de acompañarlo. Lo curioso es que la intuición de muchos seguidores del ascenso se afirmó el viernes con el empate en dos entre Central Ballester y General Lamadrid, donde el Canalla se aseguró un lugar en el reducido junto a los de Villa Devoto, Centro Español, Argentino de Merlo, Liniers, Juventud Unida, Atlas y Argentino de Rosario.
El triunfo de la Topadora porque llegó a la quinta posición, donde se ubica con 46 puntos, y quedó por debajo de Los Gallegos, Lama y la Academia del Oeste que tienen 50. En los partidos restantes frente a Victoriano Arenas y el Lobo Rojo, respectivamente, tratará de conseguir los seis puntos que quedan en disputa para culminar en la posición más alta posible. En Lugano, en cambio, se comenzó a pensar en la próxima temporada.
