La concentración Albiceleste empezó a sentir ruidos desde horas del mediodía cuando, de a poco, los venezolanos empezaron a acercarse a la puerta del hotel donde se aloja el combinado de Lionel Scaloni. Con el correr de los minutos, y a la espera de la salida de los jugadores rumbo al estadio, «La Pulga» comenzó a sentir a su propia hinchada al grito de «Messi, Messi, Messi, Messi».
Camisetas del Barcelona y del PSG. Lo que comenzó con un grupo de diez personas pasó a tener mayor convocatoria. Y a pesar de estar vallado el Marriot de Caracas, el público de la Vinotinto se apostó en la vereda más cercana para poder ver al hombre que brilló en el fútbol español, que ilusiona a los franceses, y que hace un mes levantó la Copa América con su país.
Si bien el viaje del hotel al Estadio Olímpico de la UCV no le llevará más de 10 minutos a los de Scaloni, las expectativas de una salida pronta y fuera del horario establecido, generó que los hinchas empiecen a juntarse en mayor número para pedir un autógrafo o tener una foto con Messi. Lo cierto es que en cuestión de tres horas y media, «La Pulga» ya estará en la cancha para el partido entre Venezuela y Argentina.