Gimnasia de Mendoza venció sobre el final 2 a 1 a Chicago y se metió momentáneamente en puestos de reducido.

En el República de Mataderos se veían las caras dos realidades muy distintas. Por un lado el local, de pésima temporada, buscando terminar al menos de la mejor manera. Y del otro lado la visita que, pese a su irregularidad, necesitaba un triunfo para seguir al acecho de los playoffs.

En la primera mitad Gimnasia fue superior y se paro en campo rival prácticamente toda la primera media hora. Mucho mejor que el dueño de casa, primero avisó con un cabezazo de Joan Juncos y luego convirtió el primer gol de la mano de Tadeo Marchiori que con un testazo adelantó al conjunto mendocino. Pero el equipo de Diego Pozo se quedó y le permitió a Chicago crecer y llegar al gol por la misma vía. En este caso el apellido del gol fue Matías Escudero.

En el complemento, la visita buscó mas dinámica y consiguió mayor velocidad en su juego pero fue perdiendo protagonismo y el Torito aprovechaba, teniendo la más clara con un remate del lateral Diego Martínez. Pero se quedó solo en eso. Ambos perdieron frescura y el partido se hizo bastante chato. De todas maneras había lugar para algo más. Pozo decidió mandar a la cancha a dos futbolistas que le dieron el triunfo. Leandro Ciccoloni desbordó por derecha y mandó un centro pasado que Ulises Guakinchay conectó al gol con una pirueta.

Fue final y el Lobo se llevó un triunfazo de Mataderos, que lo posiciona parcialmente en el cuarto puesto. Pese a la irregularidad y a la caída, los mendocinos dan pelea y se ilusionan con poder quedarse con un lugar del reducido.