Habían ganado Arsenal y también Manchester City, escoltas del equipo de Jürgen Klopp que tenía la obligación de imponerse en Anfield ante un rival de peso. A los Reds no le tembló el pulso en lo más mínimo, golearon por 4 a 1 al conjunto de Mauricio Pochettino y mantuvieron la ventaja en lo más alto de la Premier League.
Liverpool es una maravilla. Ni siquiera la noticia del entrenador sobre su salida a final de temporada dañó el alma de un equipo que sigue sin contar con Mohamed Salah, lesionado en la Copa Africana de Naciones. Su víctima este miércoles fue Chelsea.
Diogo Jota abrió la cuenta con un verdadero golazo. El portugués encaró por la mitad del terreno, se filtró entre Thiago Silva y Benoit Badiashile, y quedó mano a mano con Dorde Petrovic para estampar el 1 a 0 cuando iban 23 minutos de la etapa inicial.
Chelsea, golpeado, perdió una pelota en mitad de cancha y Liverpool aprovechó para estirar la ventaja a los 38 del primer tiempo. Luis Díaz encabezó la contra, vio que sobraban espacios por derecha y cedió para la solitaria entrada de Conor Bradley que sacudió con un zapatazo cruzado.
La goleada para los Reds se consumó en la complementaria gracias a un centro de Bradley por derecha que conectó de cabeza el húngaro Dominik Szoboszlai para dejar sin respuestas a Petrovic. Y a pesar de la fiesta, los Blues tuvieron un momento de ilusión con el rápido descuento de Christopher Nkunku que de nada le sirvió.
El dueño de casa no aminoró la marcha, evitó que su rival volviese a acercarse a la cueva de Alisson, y asustó con un cabezazo de Darwin Núñez que dio en el travesaño. Más allá de eso, los locales tuvieron revancha en una gran conexión sudamericana.
La frutilla del postre se dio apenas pasada la media hora de la complementaria con un lindo pase profundo de Alexis Mac Allister para Darwin Núñez. El uruguayo desbordó por izquierda, lanzó el buscapié, y Badiashile perdió la marca de Luis Díaz. El colombiano, por detrás de todos, empujó y puso cifras definitivas en Anfield.
Era un examen bravo para Liverpool que lo sorteo de manera maravillosa ante Chelsea. Se sacó un diez, felicitado y eso le permitió sostenerse con firmeza en la lucha por el título. El líder de la Premier League goleó por 4 a 1 a un rival del Big Six para soñar con un título más y un regalo para Klopp en su despedida.
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