La Topadora no se cansa de ganar y tras vencer por la mínima diferencia al Marrón, cosecha cinco triunfos al hilo. El gol para la alegría de los locales, lo marcó Ignacio Sallaberry cuando recién comenzaba el encuentro.
Por la tercera fecha de la Primera D, Liniers debía derrotar nada más y nada menos que a un rival directo como era Atlas, para no perderle pisada a Claypole (libre en esta jornada). Y con la cabeza puesta en quedarse con los tres puntos, los locales abrieron el marcador casi desde los vestuarios.
Tras una buena jugada por izquierda y un centro rechazado por la defensa visitante; la pelota quedó bollando cerca de la medialuna del arco y fue Ignacio Sallaberry quien la empalmó en velocidad; clavándola lejos de las manos de Ricardo Grieger.
Pese a estar arriba en el marcador, el protagonista no fue el local. Atlas, lejos de sentir el golpe, fue en búsqueda de la igualdad y manejó la pelota a su gusto; aunque sin generarle un peligro inminente a Ignacio Diaz Peyrous. Los minutos corrieron y la mínima diferencia se mantuvo hasta que el árbitro del encuentro le puso fin a la primera mitad.
En el complemento, los hilos del partido los seguía manejando el Marrón; aunque no terminaba definiendo las jugadas que ocasionaba. La pelota parada fue un arma que utilizó mucho Atlas para intentar llegar a la paridad, pero nunca pudo romper con el cero que mantuvo la Topadora. Ni siquiera, cuando los locales quedaron con un hombre menos producto de la doble amarilla que recibió Marcelo Araujo.
Con el triunfo bajo el brazo, Liniers iguala la posición de Claypole con un triunfo y una igualdad. En tanto, Atlas se perdió la posibilidad de cortarse por un rato y mirar a los demás equipos desde la cima.
