Una derrota ante PSG y otra contra Benfica complicaban el panorama de una Vecchia Signora que llegó al encuentro más accesible del grupo. Ante la Locomotora Verde de Israel, el equipo de Massimiliano Allegri se impuso por 3 a 1 sin mucho brillo pero con demasiado oficio.
Dominó Juventus aunque también el pleito tuvo suspenso hasta que Adrien Rabiot llevó tranquilidad en el resultado a siete minutos para el final. Maccabia Haifa jugó bien, hizo lo que pudo, y ahora necesitará ganar en Asia para soñar con un lugar en la Europa League.
Antes del cuarto de hora, los italianos mostraron sus ideas con una gran pared entre Filip Kostic y Dusan Vlahovic. El ex Fiorentina disparó y la redonda se fue cerca del palo izquierdo. Era el dueño de casa quien buscaba y terminó encontrando a diez para el descanso.
A los 35 minutos del capítulo inicial, Ali Mohamed El Fazaz no pudo cortar una pelota en ofensiva y Ángel Di María se encargó de asistir a Rabiot. El Francés, recibió del «Fideo», y fusiló a Joshua Cohen para colocar el 1 a 0 en Turín.
La alegría para la Vecchia Signora continuó en el inicio de la complementaria gracias a otra asistencia maravillosa de Di María. El argentino encabezó un contragolpe, metió un pase tres dedos perfecto para Vlahovic, y el serbio decoró semejante obra de arte con un mano a mano impecable.
Dean David descontó cuando encontró mal parado a la Vecchia Signora y puso algo de suspenso con un cuarto de hora por delante en el norte italiano. Sin embargo, en la tercera asistencia del juego del «Fideo» Di María, llegó el doblete de Rabiot para acabar con esta historia.
Maccabi Haifa, con tres derrotas en igual cantidad de partidos, quedó en el fondo del grupo H de la Champions League. Juventus, con el 3 a 1, consiguió la primera victoria aprovechando el empate entre Benfica y PSG para soñar con batallar hasta el final por un lugar en los octavos de final de este certamen.
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