Los Samurái Azules triunfaron por 1 a 0 frente a Los de Rojo en la portuaria ciudad de Muscat. Esta victoria con sabor a revancha por lo acontecido en la rueda inicial le permitió a los nipones ubicarse en puestos de clasificación directa a la próxima edición de la Copa del Mundo ya que Australia cedió unidades en su empate inexplicable frente a China.
El primer tiempo de Omán y Japón fue sumamente flojísimo. Los del croata, Branko Ivankovic, prácticamente no gravitaron ni molestaron a Shūichi Gonda, ex Horn de Austria. La visita, lo poco que generó directamente no le acertó al arco por lo cual el 0 a 0 era justo y los guardametas marcahaban sin transpirar al descanso.
Durante la complementaria, Los de Rojo contraron con una ocasión inmejorable para dejar boquiabiertos a los del Imperio del Sol Naciente pero el sablazo de Arshad Al Alawi salió muy cerca del caño diestro de la cueva nipona. Los Samurái Azules recién lograron festejar a diez del cierre gracias a un desborde de Karou Mitoma, hombre que milita en la elite de Bélgica, para que Junya Ito, empuje el esférico al fondo de la red.
Omán estuvo cerca de dar nuevamente otro batacazo en estas eliminatorias asiáticas pero le faltó oficio y vocación ofensiva ante un tibio rival que se llevó tres puntos de oro puro. Japón, que en algún momento había puesto en riesgo su clasificación a Qatar 2022, ganó por 1 a 0 en Muscat y ya trepó al segundo lugar del grupo superando apenas a Australia que pasó vergüenza empatando con China.
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