La palabra Feroe significa cordero, de hecho el escudo oficial del país tiene a dicho aninmal en primera plana. En Torshavn, los locales no pudieron pasar del cero ante el combinado Rojo-Blanco-Rojo que conduce Aleksandrs Starkovs. De esta manera ni el dueño de casa consiguió festejar en la noche isleña una épica tercera posición en eliminatorias ni su rival lo que hubiese sido su segunda victoria en este certamen.
Letonia llegaba a este partido con dos bajas. Ni el mediapunta Aleksandrs Solovjovs, ni el juvenil Dāvis Indrāns pudieron ser parte de esta contienda por estar suspendidos. Islas Feroe, en cambio, alineaba lo mejor que tenía y claramente que el objetivo era cerrar en casa, de la mejor manera, toda esta etapa de un utópico camino a Rusia 2018 para ambos.
Los Corderos locales salieron con todo en busca de un nuevo triunfo. En septiembre habían derrotado a Andorra en Torshavn y el sueño de repetir estaba intacto. De hecho en el primer cuarto de hora tuvo tres situaciones clarísimas para vulnerar a su rival. No obstante el palo le negó la apertura del marcador a Jóan Edmundsson. El centrodelantero, que en su momento estuvo bajo la órbita del Newcastle inglés, contó contra oportunidad pero careció de puntería. Y quien también se lució para mantener su valla en cero fue Andris Vanins al ahogarle el grito de gol a Hallur Hannson.
Letonia recién reaccionó pasada la primera media hora de disputa. Allí Glebs Klujskins elaboró la que, posiblemente, haya sido la acción más riesgosa para los de Starkovs. El resto, hasta el final de la etapa inicial fue de Islas Feroe que seguía avanzando con peligro pero se quedaba con las ganas de festejar un tanto puesto a que el capitán rival, Kaspars Gorkss, le tapó justo un remate a Solvi Vatnhamar.
La falta de suerte para el local siguió en la complementaria. A los 6 minutos Edmundsson volvió a encontrarse con un poste y así fue como empezaron a darse por vencidos. Sumado a ello, la visita creció en el terreno de disputa y elaboró alguna que otra jugada para vencer a Gunnar Nielsen que, realmente, no tuvo tanto trabajo. Cuando ya todo acababa, Gilli Sorensen, tuvo una situación pero no calibró la mira y se terminó perdiendo por línea de fondo.
Los palos le negaron a Islas Feroe un triunfo que lo hubiese dejado en el tercer puesto, por encima de Hungría, y en una inolvidable eliminatoria. Fue 0 a 0 con Letonia y nadie quiso comerse al cordero. Ni para festejar, ni para cortar una racha adversa de siete derrotas al hilo que, con este punto, la visita logró ponerle fin.
