La ausencia de Erling Haaland obligó a Pep Guardiola a buscar entre sus jugadores quién pudiese reemplazar el olfato ofensivo del noruego. Y en los pies de Jack Grealish encontró parte de la solución. Este sábado, el ex Aston Villa escribió una página histórica en Premier League.
Manchester City se puso en ventaja ante Crystal Palace con un tanto que necesitó la revisión del VAR. A los 24 minutos, Rúben Días le metió un pase a Phil Foden que dibujó una asistencia magnífica. Grealish, en la misma línea que Nathaniel Clyne, recibió sin marcas y no perdonó a Dean Henderson.
Con este grito, Grealish anotó por primera vez en su historia de Premier League al menos un gol en tres jornadas consecutivas. Ya lo había sufrido Tottenham y Luton Town, ahora le tocó sufrirlo a las Águilas que no tuvieron que marcar a Haaland pero se encontraron con otro atacante poderoso en los Citizens.
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