El Lobo y la Gloria no se sacaron ventajas en la primera fecha del campeonato del Nacional B. En un partido friccionado en la mitad del campo de juego fueron los de Héctor Rivoira quienes propusieron algo más que el dueño de casa. Sin embargo la ocasión más clara fue un penal que Maximiliano Cavallotti le contuvo a Christian Bernardi.
Durante la etapa inicial Instituto generó más peligro que Gimnasia y Esgrima de Jujuy. Sin embargo el ritmo propuesto por los del «Chulo» no bastó para vulnerar la valla del conjunto del norte argentino. La potencia de Gastón Machín y un mano a mano dilapidado por Gustavo Gotti fueron las cartas que presentó el elenco de la Docta en el 23 de agosto que mostró, llamativamente, un gran marco pero a su vez una particularidad. La tribuna que generalmente ocupa la gente del grupo de Milagros Sala se vio prácticamente vacía.
Lo que no pudo conseguir la Gloria en el primer tiempo tampoco lo logró en la complementaria cuando la fortuna estuvo de su lado. A los 8 minutos de la etapa final Nicolás Lamolina expulsó a Emiliano Capella y marcó penal a favor de los cordobeses. Bernardi fue el encargado de ejectuar desde los doce pasos y Cavallotti el dueño de quedarse con el disparo en dos tiempos. A esta altura el guardameta del conjunto dirigido por Mario Sciacqua ya era la figura del encuentro y lo siguió siendo para frenar cada embate de la visita.
El local sólo creó una situación de gol en los pies del ex Santamarina de Tandil, Martín Michel, y casi nada más. Así Gimnasia de Jujuy e Instituto igualaron 0 a 0 porque las chances en un arco fueron pocas y las que ocurrieron en el otro tuvieron un Cavallotti de batalla que detuvo todo.
Cronista en Jujuy: Martín Mc Intyre
