Tras la salida de Juan Pablo Gighlione por su incorporación a Ballester, la dirigencia de Lamadrid buscó rápido su reemplazo y confirmó a Leandro Bonet, de último paso por Muñíz, como la nueva incorporación.
Ya con Hernán De Lima como entrenador, un viejo conocedor de la casaca Carcelera, empezaron los trabajos del plantel para ponerse a punto y remontar la pésima imagen que los llevó al descenso a la D y una muy irregular campaña en su primer semestre en la última categoría. Por eso es que el primero en llegar fue Juan López, de último paso por Liniers y pasado en el Carcelero, Patricio Costa Repetto, quien hace tiempo estaba en tratativas con la institución pero no se concretaba y llega de Sportivo Barracas, mientras que los últimos dos en arribar son Bonet y Nicolás Frascone.
Bonet viene de ser el arquero titular de Muñiz, mientras que en 2015 tuvo un gran paso por Ituzaingó y viene a tapar el hueco que dejó Gighlione. Mientras que Frascone proviene de El Porvenir, club que lo dejó libre por problemas con el presidente, ya que no cobró el sueldo que debía, pero fue titular todo el torneo del ascenso.
Ahora para completar su plantel, De Lima buscará concretar la llegada de un marcador central y dos delanteros más para retirarse así del mercado de pases. Por lo pronto los apuntados serían Matías Palacios y Matías Troncoso.