El Villero alcanzó provisoriamente la punta del campeonato de la Primera C tras vencer al Carcelero por la mínima diferencia en Villa Devoto. En un verdadero lodazal, la escuadra de Sergio Quiroga pisó mejor que el dueño de casa que lleva tres derrotas consecutivas en una temporada para el olvido.
Talleres de Remedios de Escalada lidera el campeonato pero Deportivo Laferrere logró alcanzarlo. Si bien el Tallarín tiene un partido menos, el Verde le tiró toda la presión al equipo del sur bonaerense que, de perder, deberá compartir el primer puesto. Si bien la vista no jugó un gran partido en el Enrique Sexto, fue efectivo y supo como aguantar el marcador para estirar su invicto a 19 partidos.
Llegaba más General Lamadrid pero, al cuarto de hora, el Villero abrió la cuenta. Maximiliano Mallemaci agarró una pelota de primera, a la altura de la medialuna, y la acomodó contra el poste izquierdo de Ezequiel Bustos. De esta manera los de Quiroga se ponían en ventaja, y a partir de ese entonces sólo se volcaron a defender la ventaja.
En dos oportunidades tuvo la chance de anotar Fernando Montiel para la escuadra de Mario Rizzi pero no pudo conseguirlo. En contrapartida, a diez minutos del final del primer tiempo, Laferrere tuvo una oportunidad inmejorable para ampliar la diferencia pero el «Gato» Bustos le tapó un mano a mano a Marcelo Marzoratti y, en el rebote, Eric Herensperger se lo sacó a Bruno Rodríguez.
Cuando arrancó la complementaria, el Carcelero estuvo muy cerca de la igualdad. Marcelo Burzac ingresó al área grande por el carril derecho y sacudió contra el arco de César Monasterio que voló descomunalmente para mandar la pelota al tiro de esquina. Tuvo otra gran oportunidad el dueño de casa pero Herensperger se encontró con el esférico de repente y estrelló su remate en el travesaño. Incluso pudo arribar a la parda en tiempo de descuento pero el bombazo de Jonathan Guerrero se fue apenas desviado. El visitante, durante toda la segunda mitad, jugó a defenderse y más aún cuando el entrenador sacó a Leandro Marecos para meter a Carlos Madeo y formar así una línea de cinco en el fondo.
Deportivo Laferrere ganó una nueva final y sigue dulce. Ni el barro, ni las arenas movedizas de Villa Devoto, lograron frenarlo. El sueño del Villero para volver a la B Metropolitana ha sumado un nuevo capítulo feliz.
