El amor duró hasta que pegó el portazo. En el mercado de invierno, Juventus pusó 70 millones de euros y se llevó al goleador de Fiorentina que de la noche a la mañana armó la maleta y dejó Florencia para recalar en Turín. Más allá que no fue la primera vez que Dusan Vlahovic volvió al Artemio Franchi, en esta ocasión, los tifosi locales le recordaron que lo hecho no se olvidará.

Tal vez haya sido innecesario. La Vecchia Signora no encontraba la pelota en ofensiva y el Viola ganaba para sacar boleto rumbo a la Conference League. Más allá de eso, Massimiliano Allegri no quería que su equipo cayese en la última jornada de la temporada 2021/22 de la Serie A y por eso mismo sacó a Moise Kean para meter al serbio en el campo de juego.

Ni bien se alistó para ingresar, a un cuarto de hora para el final en la Toscana, llegaron los silbidos. Cuando se confirmó el cambio continuaron los abucheos para Vlahovic. Y así, esa historia de amor que parecía inquebranteable, se transformó en un cuento de odio por parte de la gente de Fiorentina hacia el balcánico que escogió a la Juventus y su dinero en vez de culminar la temporada con un club que, de todos modos, realizó una campaña súper loable.

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