Era del Lobo pero también lo fue de cada uno de los argentinos. Eminencia médica por donde se lo mire, abanderado de un país que siempre siento orgullo por sus logros. La dirigencia de la Academia decidió rendirme homaneja al doctor, René Favaloro, en el entretiempo del encuentro ante el Lobo por Copa de la Liga.
El cardiólogo nació en La Plata un 12 de julio de 1923 y su pasión por el fútbol estaba pintada de azul y blanco. Que nadie le explique que la sangre era roja porque para él tenía esos colores que nunca ocultó y que hasta honró con lágrimas en la platea que actualmente lleva su nombre en el Bosque.
Conoció el mundo, dio clases en las mejores universidades de los Estados Unidos, y el globo terráqueo lo recordará por ser el inventor del by-pass coronario. En el crudo invierno del año 2000, después de dejar una dura carta cuestionando al sistema sanitario de su país, eligió quitarse la vida. Ya no quería luchar más sin saber que había librado todas las batallas al mismo tiempo.
La gran relación de muchísimo tiempo entre la Academia y el Lobo hizo posible que este reconomiento tuviese el aplauso y el merecido recuerdo. Con gente de la Fundación y familiares del cardiólogo en el estadio, Racing le rindió homenaje a Favaloro, uno de los hinchas de Gimnasia La Plata más reconocidos en todo el universo.
