La victoria de Suiza sobre Camerún aseguró su página en la historia grande de los Mundiales. Breel Embolo, camerunés nacionalizado suizo, se convirtió en el primer futbolista que le convierte un gol a su país de nacimiento.
Una imagen vale más que mil palabras, y el gesto de Breel Embolo tras convertir el 1-0 de Suiza sobre Camerún lo dice todo. El delantero de Mónaco se encontró la pelota en puertas del área chica y desde allí definió el partido que abrió el Grupo G de Qatar 2022.
Nacido en Yaundé, capital de Camerún, emigró de niño junto a su madre a Francia. Se formó deportivamente en Suiza, debutó con 17 años en el Red Bull Salzburgo y en 2015, tras el permiso de la FIFA, fue convocado por primera vez para la Nati suiza.
Nunca en la historia de los Mundiales un jugador le había marcado a su país de nacimiento.
Lo más parecido ocurrió en Rusia 2018 cuando Xherdan Shaqiri le anotó a Serbia. El ex Bayern Múnich y Liverpool nació en Gnjilane, en la vieja Yugoslavia, hoy territorio kosovar declarado independiente de Serbia.
Embolo hizo historia en un Mundial que sigue sorprendiendo.