En el República de Mataderos, donde se convirtió en una fortaleza inexpugnable, el conjunto de Andrés Montenegro se impuso con los goles de Naya y Bergara al León del Imperio que sigue hundido.
Nueva Chicago se reconvierte y gracias a su entrenador más el efecto psicológico de renovar fuerzas hoy pelea un lugar en Reducido. Quiere dejar atrás esos oscuros tiempos de peligro de descenso e infinidad de problemas. Ayer primero mediante Ezequiel Naya que marcó el primero (pleno del ex técnico de Flandria en darle confianza) y luego mediante otro gran acierto del Lobo que es Matías Bergara que metió un golazo para resumen de fin de año o candidato al Puskas. El Torito lo llevó a su forma y se quedó con un triunfazo, uno más en la campaña que es más que interesante.
La victoria lo dejó en el octavo escalón ya que la derrota de Morón alejó a los del Oeste de ese privilegio mientras que para el León las cosas se ponen difíciles porque quedó comprimido en zona baja y estaría disputando un desempate por el descenso.
