
En una nueva edición del duelo mendocino de la Liga Profesional, Independiente Rivadavia y Godoy Cruz empataron sin goles en un partido lleno de tensión, entrega y momentos de alto voltaje. El resultado dejó más conforme a la Lepra, que jugó gran parte del complemento con un jugador menos por la expulsión de Bottari, pero igualmente logró sostener el resultado y mantener el orden. Sobre el final también Villa se fue expulsado por doble amonestación.
Desde el inicio, Independiente Rivadavia mostró una postura ofensiva, presionando alto y buscando constantemente a Sebastián Villa, su jugador más desequilibrante. El colombiano fue protagonista con varios centros peligrosos y un tiro libre que obligó a una gran intervención del arquero Petroli. Por su parte, Godoy Cruz fue paciente, esperando su momento y apostando a la precisión en el mediocampo con Arce y González como generadores de juego.
La primera mitad fue favorable a los de Alfredo Berti, que se adueñaron del balón y generaron las situaciones más claras. Sartori, Amarfil y Costa tuvieron oportunidades, pero la falta de eficacia y las respuestas de Petroli mantuvieron el marcador en cero.
El segundo tiempo fue la resistencia leprosa
En el complemento, el panorama cambió rápidamente con la expulsión de Bottari tras la revisión del VAR. Con uno menos, Independiente Rivadavia se replegó y apostó al contragolpe, mientras Godoy Cruz intentó adueñarse del partido.
El Tomba tuvo una chance clara con un remate de media distancia de González que Centurión envió al córner con una gran estirada. En la respuesta, Fernández casi sorprende con una media vuelta que se fue apenas desviada. Sobre el final, Barbieri dispuso de la más clara para el visitante, pero su disparo salió ancho y un cabezazo que pasó cerca del arco tombino.
El pitazo final decretó un empate 0 a 0 con sabor a batalla. Independiente Rivadavia se fue con la cabeza en alto por su entrega y solidez defensiva, mientras que Godoy Cruz lamentó no haber podido aprovechar la superioridad numérica. Un clásico mendocino que dejó emociones, sacrificio y un punto que suma más desde lo anímico que desde la tabla.
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