En Argentina se ha perdido hace tiempo en famoso ida y vuelta entre las hinchadas pero en los torneos continentales se da esa posibilidad de escuchar a ambas parcialidades con sus creativos cánticos. Ayer, en el estadio La Portada de La Serena, los albicelestes y los charrúas se pusieron color y calor a la Copa América de Chile 2015. Hasta los locales se hicieron sentir pero la genialidad de los nuestros los callaron con respuestas certeras.
Los celestes y blancos coparon el escenario del Norte del país trasandino y fueron mayoría. Las típicas canciones de «Somos locales otra vez» y «Vamos, Vamos Argentina…» se escucharon en toda la cancha y se repitieron durante todo el partido. Los uruguayos contestaron con la cuenta ascendente de las 15 competencias continentales logradas en toda su historia y con el famoso «Soy Celeste, Soy Celeste», sin olvidar la entonación de la parecida «Volveremos a ser campeones como la primera vez». Los rivales no se olvidaron de la eliminación en la Copa de Argentina 2011 y lanzaron: «No te olvides lo que pasó la última vez». El control del ruido lo tomaron los argentinos. En tierras chilenas, el hit de los hinchas fue el inolvidable «El que no salta es un inglés». Con respecto a esto, en una de las tribunas, un espectador local sacó una bandera de Inglaterra pero los carabineros lo echaron por provocación. La pasividad de Messi en algunos momentos hizo que los contrincantes se despacharan con un «Ponelo a Messi…» pero la rapidez albiceleste respondió por la ausencia de Luis Suárez por la mordida al italiano Chiellini en el Mundial de Brasil 2014: «Ponelo a Suárez…».
Un párrafo aparte para los chilenos que, en distintos períodos, entonaban su tradicional grito de «Chi, Chi, Chi, le, le, le, Viva Chile». Sin embargo, la jugada le salió mal al local porque los nuestros son tan veloces que se aprovecharon de que Chile no ha ganado en su vida futbolística ninguna Copa América: «Ganá una Copa…».
El duelo de hinchadas se sintió en La Serena y nosotros los disfrutamos como se debe. Algo extinto en tierras rioplatenses.