Anoche fue una jornada histórica para el Patrón de Paraná. Repasá el camino a la primera estrella del Rojinegro.
En Mendoza, Patronato tuvo una noche de domingo soñada. Con el gol de Thiago Banega, los comandados por Facundo Sava lograron algo histórico para el club y obtuvieron el primer título del club, y además la clasificación a la próxima Copa Libertadores.
Pero el camino que tuvo que atravesar fue duro para el Patrón, y comenzó en los 32 avos de final con la victoria frente a Deportivo Morón. En una ráfaga de dos minutos, Axel Rodríguez y Nicolás Castro convirtieron los tantos y le dieron la clasificación la próxima instancia al equipo.
El 22 de junio fue turno del encuentro frente a Colón por los 16avos de final en el estadio Coloso Marcelo Bielsa de Rosario. Wanchope Ábila había puesto en ventaja al Sabalero, pero Alexander Sosa, logró empatar la historia y mandar la definición a los penales. Altamirano, que ya le había atajado un penal a la Pulga Rodríguez en los 90, contuvo otro penal y sumado a los dos que desviaron los jugadores de Colón, le permitió a Patronato avanzar a octavos.
En esa instancia se midió el 9 de agosto en el Centenario de Resistencia frente a Gimnasia de La Plata, que venía muy bien en la Liga Profesional. Sin embargo los de Sava volvieron a tener un gran encuentro, y con un doblete de Marcelo Estigarribia lograron vencer al Lobo por 2 a 1 -Aleman había marcado el empate transitorio-.
Ya en cuartos el rival fue nada más y nada menos que River. En un partidazo, el resultado termino siendo empate 2-2 con los goles de Estigarribia y Jonathan Herrera para el Patrón y de Zuculini y de Quintero para los de Gallardo. Con esta igualdad, la definición volvía a estirarse hasta los penales, en donde Altamirano volvió a ser clave atajándole el último a Matías Suárez, y metiendo a su equipo entre los cuatro mejores.
En semis el rival fue Boca, que venía de coronarse de la Liga Profesional, y estuvo muy cerca de ganarle en el tiempo regular con otro tanto más de Estigarribia. Sin embargo en el último cuarto de hora, Villa lo empató con una pena máxima, y otra vez la serie se iba a definir desde los 12 pasos. Pero volvió a aparecer la figura del golero, que con muy buenas intervenciones fue determinante y atajó tres de los cinco penales del Xeneize (contuvo a Óscar Romero, Varela y Villa) para meter a su equipo en la final.
En la definición, el rival fue Talleres, y a 90 minutos de la gloria, Patronato no se achicó, y con la suerte de su lado, y gracias al gol de carambola de Banega, los de Sava derrotaron por 1 a 0 al conjunto cordobés y lograron la primera estrella para el club.
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