El asesinato del «Lolo» Regueiro, los más de cien heridos, aquellas personas que perdieron la vista por el desmedido accionar policial en la noche del jueves tuvo su minuto de silencio en Avellaneda. Y en el Cilindro, donde durante décadas celebraron su amistad, la Academia le brindó el apoyo total a la gente del Lobo.

«Fuerza a la familia de Gimnasia» decía una bandera colgada a la altura donde para la Guardia Imperial. El gesto no quedó solo en ese letrero sino que posterior al minuto de silencio, la hinchada de Racing gritó: «el que no salta es un botón» para luego recordar aquellos tiempos de estrecha relación.

«Olelé, Olalá, el Lobo y la Academia unidos siempre están» cerró el cálido minuto de silencio por Regueiro y el cariño total brindado desde el Cilindro hasta el Bosque. Al fin y al cabo, más allá de esos años de amistad, ha sido el grito de todo el fútbol argentino que dijo basta a la represión desmedida de los opertivos policiales.