Los Armeros y los Celestes ofrendaron un pálido 0 a 0 en el estreno de la temporada 2020/21 de La Liga. Todo España y el globo terráqueo pendiente de este primer compromiso que aburrió a propios y extraños en Gaipúzcoa y que, contó, con la primera expulsión del campeonato.

El primer tiempo tuvo algunos condimentos sobre todo en el arranque. A los 2 minutos, Eibar robó una pelota en la salida del Celta, pero Pedro León no supo aprovechar la situación rematando alto en pleno área grande y en una oportunidad inmejorable.

Antes del cuarto de hora, el elenco de Oscar García también asomó sus narices por la retaguardia contraria. El uruguayo, Lucas Olaza, desbordó por izquierda y descargó para Nolito quien, de primera, exigió a Marko Dmitrovic. El arquero croata, en una volada providencial, manoteó la caprichosa por arriba del travesaño mandando el esférico al córner.

Entrado el capítulo inicial, tuvieron una ráfaga interesante ambos elencos. El Eibar contó con un zaptazo de Sergi Enrich que tenía destino de red aunque impactó en la mandíbula de su compañero, y terminó desviándose. Otro intento del local que careció de puntería fue un cabezazo de Kike García que salió apenas ancho. En contrapartida, Celta respondió con un pelotazo largo para Brais Méndez quien controló bien, quiso definir de emboquillada, pero le pifió al rectángulo.

La complementaria tuvo menos emociones aunque más claras. A los 10 minutos, los Armeros asustaron a su oponente con una hermosa volea de Pedro Bigas que se fue cerca del caño diestro de Iván Villar. Un cuarto de hora más tarde, Dmitrovic tuvo una doble salvada mayestática en su cueva para negarle la apertura del marcador al conjunto Celeste.

Como para sacudir la modorra, Eibar se quedó con diez hombres cerca del final por la doble amarilla de Pape Diop. Y Celta, con el reloj en contra, no pudo aprovechar ello. Ambos no ligaron, se midieron más de la cuenta, y levantaron el telón de La Liga 2020/21 con un 0 a 0 para olvidar rápidamente.