EDITORIAL: LA COPA, LA COPA, SE MIRA Y NO SE TOCA

Colombia, no. Estados Unidos, tampoco. Suspenderla no está dentro de los planes. Argentina está en veremos. La realidad social y sanitaria de Sudamérica puso en jaque a uno de los eventos continentales de selecciones a días de su fecha de inicio. Por el momento, como se cantaba en otras épocas, «la Copa, la Copa, se mira y no se toca».

Miles de voces a favor, otro tanto en contra, y la gran dicotomía de quienes amamos este deporte pero también así la vida. Nadie podrá discutir que la pandemia complicó el panorama del planeta por entero pero, con sólo mirar las finales europeas y ver al público en las canchas, el costado sudoriental del planisferio desnudó tristes y conocidas realidades.

Está claro que todos quisiéramos que la Copa América se juegue íntegramente en Argentina pero, a decir verdad, también nos gustaría tener las tribunas llenas, las banderas flameando, los rostros pintados con esas tonalidades patrias, los himnos sonando a viva voz. El color y el calor que suelen regalarnos los eventos deportivos y que, claramente, sin ello, no es lo mismo.

Candidato a ganar el trofeo hay muchos, pero por el momento triunfa la incertidumbre. Mientras todo esto se cocina, hay otro campeonato mucho más importante y es el de las vacunas, los contagiados, y por sobre todas las cosas, los que ya no están. Tristemente vivimos en un país donde ahí no importa si salimos últimos con los peores registros de todos.

De rodar la pelota, es posible que la gente se olvide de lo que realmente nos debería interesar. Pasaremos del «traeme las vacunas» al «traeme la Copa, Messi, traeme la có». Y si la Pulga se ilumina, tendremos una gran alegría entre decenas de miles de tristezas frente a una runfla de gobernantes que necesitan oxigenarse políticamente por vienen saturando hace bastante.

Colombia descartado. Estados Unidos ofreciendo hasta las vacunas en los aeropuertos y en las playas con tal de ser escuchados para recibir el torneo. Chile postulándose como ese sabelotodo de la escuela primaria que quiere opacar a los demás. Uruguay golpeando en silencio. Argentina en duda. Y por el momento, la Copa, la Copa, se mira y no se toca.

Acerca de Marcelo Patroncini 21855 Articles
Nació en agosto de 1982. Leonino y soñador. Desde chico jugaba a ser periodista con la máquina de escribir que había en su casa. Amante del fútbol, la gastronomía y los viajes. En 2005 fundó Vermouth Deportivo junto a Fran Alí.