Con dos tiros desde los doce pasos, ejecutados a la derecha del arquero, Los Malevos de Pompeya y los Matadores de Caseros repartieron unidades en el Guillermo Laza. Con el punto conseguido, los de Leonardo Ragazzo superaron a Brown de Adrogué y quedaron como únicos escoltas del líder, Estudiantes de Buenos Aires.
En el comienzo de la decimoctava fecha, Deportivo Riestra quería continuar con su racha de tres victorias consecutivas frente a un Estudiantes de Buenos Aires que llegaba con un invicto de seis partidos. Ambos conjuntos en franca levantada proponían, en la previa, un atrapante encuentro que fue de menor a mayor con el correr de los minutos.
La etapa inicial fue carente de emociones. La figura indiscutida de los primeros 45 minutos fue Gonzalo Bravo que mareó a toda la defensa rival hasta que se fue reemplazado en el entretiempo. Fue Ramiro Martínez quien desvió al tiro de esquina un fortísimo remate del diez local en lo que fue una de las dos aproximaciones de riesgo que se generaron. La otra fue un cabezazo de Jonatan Herrera que se fue muy cerca tras un buen tiro libre de Sebastián Soto.
Estudiantes de Buenos Aires no llegaba con peligro al área rival mientras que Deportivo Riestra no lograba conectar el último pase como para vulnerar la valla de Martínez. Y no cambió el esquema en el comienzo de la complementaria donde, a pesar de lo parejo de la contienda, quien manejaba las riendas era el dueño de casa.
A los 10 minutos Gonzalo López Aldazábal sancionó el primer penal de la tarde. Herrera tomó la responsabilidad y acomodó la bola contra el poste derecho mientras el guardameta rival volaba hacia el otro costado. Era el 1 a 0 para la escuadra Blanquinegra que se arrimaba al Dragón, líder del campeonato, que incluso tiene un partido más ya que los del Bajo Flores recién recuperarán el postergado ante UAI Urquiza el venidero miércoles.
Con la victoria parcial, los de Ragazzo continuaron imprimiendo su ritmo protagónico pero sin eficiencia. El Pincha, en cambio, comenzó a adelantarse en el terreno de juego. Para ello, Juan Carlos Kopriva apostó con cambios ofensivos que le dieron el resultado esperado. Pasada la media hora el colegiado marcó el otro penal de la tarde, en este caso, favorable a los de Caseros. Diego Torres tomó la responsabilidad y pateó también hacia la derecha. Gustavo Ruhl adivinó la intención, puso las manos, amortiguó el disparo pero la pelota se dirigió contra el poste opuesto hasta quedar dentro del arco.
El 1 a 1 a diez minutos del final dejó todo abierto. Porque el local se fue a buscar la victoria y la visita estuvo cerca de conseguirla. A los 40, Torres, ejecutó un tiro libre perfecto que Ruhl descolgó volando hacia el tiro de esquina. Y en tiempo de descuento, el ex arquero de Acassuso, puso en órbita una pelota parada que casi cae a espaldas de Martínez pero el guardameta del Blanquinegro reaccionó deshaciéndose del esférico.
Fue final en el Bajo Flores donde Deportivo Riestra y Estudiantes de Buenos Aires repartieron puntos porque ambos convirtieron sus penales con un buen remate a la derecha.