La Selección Boliviana de Fútbol cayó por la mínima ante su par de Curazao cerrando sin triunfos la doble jornada amistosa que disputó en la dependencia caribeña. La Verde quedó en deuda y jugó más de veinte minutos con nueve por las expulsiones de Diego Bejarano y Pedraza. En tanto el local, más interesante que discreto, consumó la victoria con la diana de Leandro Bacuna.
El Estadio Ergilio Hato de Willesmtad, capital curazoleña, sirvió de escenario para el segundo cotejo amistoso que allí disputaron los primeros Seleccionados de Bolivia y Curazao, territorio autónomo neerlandés ubicado en el sur del Mar Caribe. Ambos venían de igualar uno a uno el último viernes, Gino Van Kessel abrió la cuenta para el conjunto de Remko Bicentini mientras que el autogol de Darryl Lachman decretó la parda para los de Mauricio Soria.
Curazao, último Campeón de la Copa Caribe que no alcanzó por muy poco la Fase de Grupos en la Eliminatoria a Rusia de Concacaf, impuso condiciones durante la primera mitad ante un Verde flojo aunque sin la precisión para romper el score.
Ya en el complemento llegaron las acciones más destacadas, luego que el cotejo se picara con un tumulto entre jugadores en mitad de cancha que dejó un expulsado por bando: Diego Bejarano para la visita y Jarchinio Antonia para el local. En doce minutos Leandro Bacuna jugó un lindo pase filtrado para Charlison Benschop; el delantero del Hannover 96 penetro el área y recibió una clara infracción de Pablo Pedraza que el juez no dudó en sancionar como penal (además de mostrar segunda amarilla al defensor).
Leandro Bacuna, lateral del Aston Villa, cobró la factura abriendo el pie derecho colocando la pelota bien lejos del salto de Carlos Lampe. Ganaba Curazao y estaba bien, lo que quedó fue defender sin grandes sobresaltos la ventaja ante un rival con ocho jugadores de campo y su arquero.
Ganó Curzao cerrando esta doble fecha amistosa con una parda y victoria ante el Seleccionado Sudamericano, enorme paso para el conjunto caribeño. Bolivia solo encendió señales de alerta en el año previo a volver a iniciar una nueva eliminatoria.