CORONAVIRUS, EL ENEMIGO DE LA NBA

Por: Facundo Olguín | @Facunicolas23

Por la cantidad de casos de COVID positivo, se suspendieron los partidos de Mavericks vs Pelicans y Bulls vs Celtics.

El virus mutó y causó estragos en todo el mundo. Crecen los casos en la NBA de jugadores portadores asintomáticos de COVID-19 y eso trae dolores de cabeza, no sólo para el infectado, sino que también para sus compañeros y cuerpo técnico. Durante las últimas semanas, esto puso en jaque a varias franquicias y hasta se han suspendido partidos.

Parecía que, desde la burbuja de Orlando, no habría más casos de COVID en la NBA. Sin embargo, eso no ocurrió. Los viajes y las fiestas hicieron que aparezcan los primeros después de tanto tiempo, por lo que se puso bajo la lupa a los protocolos de seguridad e higiene. El primer caso fue el 23 de diciembre en Houston Rockets con James Harden, tras aparecer un video por las redes sociales de la estrella de la franquicia en una fiesta con una multitud y sin barbijo protector. Esto causó que, tras las pruebas, tres jugadores arrojaran positivo en Nuevo Coronavirus y otros cuatros fueron puestos en aislamiento por ser contacto estrecho. Además, por las lesiones de Ben McLemore y KJ Martin no llegaron a la mínima de 8 jugadores.

Ahora entramos más acá en el tiempo. El 9 de enero, Seth Curry, lesionado con un esguince de tobillo, compartió la banca de Philadelphia 76ers ante Brooklyn Nets y, en mitad del juego, se enteró que el test le dio positivo. Ante esto, el plantel se mantuvo en cuarentena en New York hasta horas antes del partido con Denver Nuggets. Juntó con lo justo ocho jugadores, la gran mayoría de sus titulares no estuvieron disponibles, por lo que sólo tres de experiencia pisaron el parquet, entre ellos: Danny Green, Dwight Howard y Tony Bradley, el resto, todos rookies.

En las últimas horas, se conoció que Jayson Tatum, de Boston Celtics, dio positivo. El caso de la superestrella de los verdes es peculiar, en el primer hisopado dio negativo, pero en la contra prueba no. Sin embargo, a la espera del resultado se decidió por cerrar el Centro de Entrenamiento. Como si eso fuese poco, Miami Heat tampoco juntó 8 jugadores para el juego por contacto estrecho de COVID, por lo que también se perderán el juego ante Chicago Bulls del 12 de enero.

Sumado a lo de Tatum, en Dallas Mavericks pasó lo mismo con Maxi Kleber. Tras conocerse el test positivo del virus, también cerraron su Centro de Entrenamiento. En las últimas horas, se conoció -por comunicado oficial- que su encuentro ante New Orleans Pelicans quedó postergado por falta de jugadores habilitados. Justo cuando Kristaps Porzingis parecía volver al campo de juego.

Por lo pronto, el martes habrá una reunión con los organizadores de la NBA y NBPA para revisar el protocolo de seguridad e higiene. Además, lo que trascendió en las últimas horas es que los partidos se podrían suspender entre 7 a 14 días. Esto se superpone con los dichos de Marc Stein días atrás, que la NBA no iba a parar ante casos de COVID.