Los Terremotos de Matías Jesús Almeyda venían de comerse seis con Portland Timbers y, algunas fechas atrás, siete con el Seattle Sounders. A principios de mes, Los Ángeles FC le metieron cinco en California, y el Galaxy tres. Sin embargo, el colador del «Pelado» continuó en la noche de Denver porque los Rapids, a media máquina, los vapulearon con un indiscutible 5 a 0.
De no ser Estados Unidos donde el deporte lo toman con otro tipo de pasión, San José Earthquakes tendría un lío interminable puertas adentro. Con dieciocho tantos en contra en las últimas tres derrotas, los matutinos y los programas deportivos se harían un festín con el conjunto del oriundo de Azul que ya no se pone «colorado». De hecho, justamente, Colorado fue quien no tuvo piedad en la larga jornada del miércoles de la MLS.
Por suerte el ex Nueva Chicago, Daniel Vega, fue clave para evitar un papelón mayor. A los 20 minutos del primer tiempo ya había evitado la caída de su valla tras un cabezazo letal de André Shinyashiki en el área chica y, más tarde, tapándole otro testazo al brasilero que, desde muy joven, dejó su San Pablo natal.
Todo era del dueño de casa en Denver. De hecho, a los 29 minutos, Kellyn Acosta abrió el marcador pero el VAR acabó anulándolo por posición adelantada del mediocampista norteamericano. Sin embargo, no tardó en llegar el primero de los cinco tantos válidos para la escuadra de Robin Fraser sobre el confundido elenco de Almeyda.
Iban 34 cuando el inglés, Jack Price, le puso un precio elevado a su pelota parada. Cole Bassett cabeceó sin marcas y, a pesar de la estéril volada del «Indio» Vega, clavó el 1 a 0. No obstante, hubo que esperar al inicio de la complementaria para que el dueño de casa se haga una verdadera panzada de goles en el Dick´s Sporting Goods Park.
A los 4 minutos, y en un avance escalonado, aprovechando el desconcierto de San José, los muchachos de Fraser estiraron la ventaja. Pase de Price para Acosta y de éste para Jonathan Lewis que pisando el rectángulo mayor estampó el merecidísimo 2 a 0 de Colorado que aún tenía mucho más por dar en la noche estadounidense.
El desconcierto de los muchachos de Almeyda, se profundizó a veinte del final porque Tommy Thompson empujó contra su propia portería un centro de Shinyashiki que no revestía problema alguno. Ya el 3 a 0 era irreversible en Denver aunque los de Fraser iban por más y conseguirían estirar la diferencia cuando iban 33 por intermedio del uruguayo, Nicolás Mezquida, quien recibió una perfecta asistencia de Auston Trusty y, completamente en soledad, desde la medialuna, tuvo todo el tiempo del mundo para convertir una diana más.
Los Terremotos prácticamente ni molestaban a William Yarbrough. Últimos, sin preocuparse demasiado, y esperando que se termine cuanto antes este suplicio, no tuvieron más que ver como los Rapids volvían a celebrar la última conquista del encuentro. Tres defensores visitantes no pudieron parar un tremendo avance local para que Shinyashiki coloque cifras definitivas.
Colorado goleó 5 a 0, se metió en zona de playoffs, y al menos se sacó la espina de aquél 1 a 1 frente a los del «Pelado» en California. San José Earthquakes sufrió otra derrota sumamente dolorosa, de esas que alertan que sucede algo más que un infortunio futbolístico. Pero, después de comerse siete y seis, que le metan cinco no los pone «Colorado».
