Ayer, All Boys derrotó por 2 a 0 a Brown, en Adrogué y cerró el torneo de la mejor manera. Matías Jaime, en dos oportunidades, convirtió los goles para los dirigidos por José Romero, ambos en el primer tiempo. Los dirigidos por Pablo Vicó terminsron von 10 hombres por la expulsión de Alejandro Quintana. El Albo terminó el campeonato con 26 puntos, mientras que el Tricolor, con 28.
Ambos llegaban al partido con sus objetivos de la campaña cumplidos: salvarse del descenso. Sin embargo, este encuentro servía para lo que viene, teniendo en cuenta que los dos estarán peleando por los descensos el año que viene, y querían cerrar el semestre con una victoria que engrosara los promedios.
Pero con el pitazo inicial de Ariel Suárez, fueron los de Floresta quienes se adueñaron del balón, y rápidamente se pusieron en ventaja en el marcador. A los 11, centro desde la derecha de Ricardo Blanco y quien apareció sólo por izquierda fue Jaime, que le cambió la trayectoria a Martín Ríos, para el 0 a 1. Pero con el gol, la historia no cambió demasiado. Más allá de alguna pelota parada que llevaba peligro al arco defendido por Gastón Losa, fue All Boys que encontró el camino y volvió a convertir. A los 32, tras una buena jugada entre Julián Fernández y Hernán Grana, fue el ex Boca quien envió un buen centro y fue otra vez Jaime que apareció por izquierda para convertir el segundo gol.
Para el complemento, Brown salió decidido en busca del descuento. Empujado por su gente, se aproximaba, aunque sin peligro, al arco de Losa. Hasta que a los 5 minutos, Quintana le pegó un tremendo codazo a Franco Chiviló, y fue expulsado. El jugador del Albo terminó con dos dientes flojos, que le atravesaron el labio superior, y debió ser reemplazado por Darío Stefanatto. Tras la expulsión, a los dirigidos por Pablo Vicó le siguieron llegando, y fue clave la seguridad de Ríos como para detener los remates de Germán Lesman y Maximiliano Salas.
Tras 8 minutos de descuento, el árbitro Suárez señaló la mitad de la cancha, y dio por finalizado el partido. Brown no pudo cerrar el torneo con una victoria ante su gente, aunque terminó redondeando una buena campaña, en la que logró salvarse del descenso, y un buen colchón de puntos como para arrancar más aliviado la temporada que viene.
Por otro lado, All Boys ganó y cerró un semestre irregular. Pero deberá pensar en lo que se viene, que será un recambio importante: deberá pensar en un equipo sin Fernández (su estandarte en el mediocampo), sin Ricky Blanco (su generador de juego), sin Lesman (el goleador del torneo con 17) y sin Pepe Romero.