Adenor Leonardo Bacchi, conocido por todos como Tite, no escondió su descontento tras la igualdad del debut entre su Brasil y Suiza. El entrenador de la Canarinha asistió a la ronda de prensa FIFA y le atribuyó el flojo rendimiento, principalmente, a la ansiedad del equipo por buscar el resultado.
Desde la igualdad 1-1 ante Suecia en el Estadio José María Minella de Mar del Plata, un 3 de junio de 1978, que Brasil no cedía puntos en el arranque de Copa Mundial. A partir de 1982 fueron solo triunfos ante la Unión Soviética, España, Suecia, Rusia, Escocia, Turquía, Croacia, Corea del Norte y nuevamente Croacia.
La seguidilla se cortó con la igualdad uno a uno ante Suiza en Rostov del Don, cotejo en el cual el Scratch se mostró por debajo del nivel que hasta ayer venía demostrando. El inicio de la conferencia de prensa estuvo orientado a la supuesta falta de Zuber, autor del empate, contra Miranda en la previa a su diana: “Me gustaría responder otra pregunta, incluso porque puede parecer excusa por el empate, pero la jugada de Miranda fue muy clara. Y no estoy justificando el resultado, pero no se pueden concebir esos errores a este nivel de competencia”
Luego llegó el momento de analizar el cotejo: “Hicimos una primera mitad parecida a lo esperado, pero después nos costó asumir el gol del empate. Cuanto más arriesga el rival nosotros tenemos que mantener más aún la posesión de balón, somos un equipo muy eléctrico, y sé que tenemos las condiciones para producir mucho más”.
Y agregó: “La ansiedad por lograr el resultado golpeó fuerte y nos apresuró demasiado. Esto se tradujo en la finalización del partido, cuando te apresuras demasiado el último toque suele ser más impreciso y eso explica la gran cantidad de tiros que desviamos. Insisto en que nos costó asumir el gol en contra, los siguientes diez minuto al empate fueron realmente complicados, pero al final tuvimos oportunidades para vencer»
El cierre fue contundente: “Claro que mi expectativa era de victoria. No estoy feliz con el resultado”
