El derbi germano tuvo un cierre no apto para cardíacos. El Gigante de Baviera parecía que recuperaba la cima del campeonato en la Bundesliga pero, en la última y con todas las fuerzas volcadas en ofensiva, el Aurinegro consiguió un 2 a 2 que también lo festejó Friburgo y Union Berlín.
Tras un arranque con más roce que fútbol, Bayern Múnich pudo inflar las redes recién pasada la media hora inicial. De ahí en adelante, reaccionó Borussia Dortmund, en una cuota de lo que fue realmente el clásico de Alemania en Renania del Norte.
La visita abrió la cuenta a los 32 minutos cuando Jamal Musiala avanzó por izquierda, se frenó, descargó hacia el medio y Leon Goretzka con un derechazo rasante sorprendió al guardameta local. Las yemas de Alexander Meyer rozaron apenas el esférico pero no pudieron evitar el 1 a 0.
Borussia Dortmund respondió. A diez para el entretiempo, Donyell Malen sacudió con un derechazo que tapa Manuel Neuer. Al minuto del segundo tiempo Marius Wolf sacó un zapatazo venenoso que el guardameta del Bayern Múnich que manoteó el intento al tiro de esquina.
Cuando el Gigante de Baviera apretó el acelerador, estiró la ventaja. Sadio Mané se lo perdió con una palomita que era más fácil meterla adentro que afuera. Sin embargo, a los 7 minutos y casi con una jugada fortuita, los de Nagelsamann festejaron el segundo.
Musiala quería dar un pase y el mismo le salió perfectó porque se interpuso Salih Özcan. El mediocampista local quiso bloquear y la redonda le quedó servida a Leroy Sané que probó desde afuera e infló las redes del Aurinegro en lo que parecía asunto totalmente liquidado.
El campeón reinante se fue quedando sin gasolina y el dueño de casa lo aprovechó. A los 28 minutos, Anthony Modeste enganchó ante Dayot Upamecano y descargó para Youssoufa Moukoko que frente a los tres palos no perdonó a Neuer y sembró de suspenso el cierre del clásico.
Borussia Dortmund se perdió el épico empate en los pies de Modeste. El francés tuvo revancha y en la última del partido empujó por detrás de todos un centro de Wolf para desatar la locura en Renania del Norte. Así, el equipo de Edin Terzic igualó 2 a 2 con un Bayern Múnich que dejó escapar la cima en la última jugada del derbi.
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