La maravillosa campaña de los Rossoblu tuvo un triunfo totalmente esperado en la noche del domingo. El equipo de Thiago Motta no tuvo problemas en derrotar por 2 a 0 al Granate de Filippo Inzaghi que milita en el último lugar de la Serie A.
Salernitana, de pobrísimo torneo, sumó su novena derrota en quince presentaciones. Los errores del primer tiempo cotizaron carísimo en un equipo que va camino al descenso en la elite italiana. Y de todo ese se aprovechó este Bologna que por el momento se ubicó en puestos de Champions League.
A los 8 minutos del primer tiempo llegó el 1 a 0 para los de Motta en un zapatazo rasante de Remo Freuler. El tiro del suizo no revestía demasiado problema pero Benoit Costil decidió dar rebote y allí apareció Joshua Zirkzee para empujar al fondo de la red.
El neerlandés marcó su doblete cuando iban 20 gracias a un pase atrás totalmente desafortunado de Matteo Lovato. Zirkzee se hizo del esférico, esquivó al guardameta francés del elenco Granate, y a pesar de no tener demasiado ángulo estiró la brecha.
La goleada se pudo consumar en la complementaria pero la que tuvo el escocés, Lewis Ferguson, terminó dando en el palo derecho de Costil. Y cuando menos se lo esperaban, los de Inzaghi descontaron con un cuarto de hora por delante gracias a un derechazo de Simy desde la puerta del área grande.
Salernitana quedó último con ocho unidades, a tres nomás de la permanencia milagrosa, y a treinta de la cima. Bologna, de mayor a menor, se impuso por 2 a 1 para subir provisoriamente del noveno lugar al cuarto en la Serie A y pisar puestos de lo que sería una histórica clasificación a la Champions League.
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