El Viola entró en turbulencia y no pudo pilotear de la mejor forma este presente. Sin hacer pie en la Serie A y empatando contra un equipo de Letonia en Coference League, los de Florencia volvieron al torneo local y perdieron en la tarde del domingo. El Rossoblú se impuso por 2 a 1 y se dio el gusto de festejar la primera victoria de la temporada.
Fiorentina hizo méritos para ganarlo y también para perderlo. Así, de manera inexplicable, los de Vincenzo Italiano trastabillaron contra un Bologna que, en una ráfaga, terminó quedándose con los tres puntos aprovechando dos horrores defensivos de su rival.
Durante el primer tiempo, el Viola fue el único animador en el Renato Dall’Ara. Un zurdazo de Giacomo Bonaventura desde la medialuna que se fue apenas alto, y un cabezazo de Lucas Martínez Quarta que manoteó Lukasz Skorupski por encima del travesaño fueron las ocasiones para los de la Toscana que dominaban el asunto.
El premio para Fiorentina llegó a los 8 minutos del segundo tiempo. De una segunda jugada de un córner, llegó el centro rasante de Riccardo Saponara que encontró Martínez Quarta empujando en el área chica. El argentino festejó aunque pasó de héroe a villano en un parpadeo.
Los locales reaccionaron y se valieron de dos errores defensivos para pasar a la victoria. Antes del cuarto de hora, Igor Julio falló en el cálculo, dejó picar la pelota, quedó desorientado, y Musa Barrown corrió derecho al arco para estampar el 1 a 1.
El Viola, golpeado, sufrió otra trompada al rato nomás. De un pelotazo que no revestía problema, Martínez Quarta perdió la pelota. Denso Kasius le robó la redonda al «Chino» y el neerlandés mandó un centro perfect para que Marko Arnautovic empuje por detrás de todos.
El Rossoblú infló el pecho y brilló en el Renato Dall´Ara cuando el resultado ya estaba en su favor. Arnautovic pudo amplir y se lesionó. Barrow probó de media distancia y le sacó astillas al palo izquierdo de Pietro Terracciano. Los de la Toscana, sin ideas, dejaron pasar otra oportunidad.
Fiorentina se fue con las manos vacías y, entre torneo local y Conference League, llegó al sexto encuentro sin victorias. Bologna dejó atrás un flojo arranque por Serie A, ganó 2 a 1, y celebró su primer triunfo para despegarse de los puestos de abajo y darle una gran alegría al equipo que ahora conduce Luca Vigiani.
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