El Aurirrojo volvió a las prácticas el primer lunes de julio con nuevo entrenador pero sin caras nuevas en el plantel. La salida de Paolo Montero a Colón de Santa Fe obligó a la dirigencia a buscar un nuevo director técnico y encontró en Omar Labruna al reemplazante para comenzar con la pretemporada de cara al próximo torneo del Nacional B.
Incorporaciones no hubo. La gran temporada pasada donde hasta último momento tuvo chances de campeonar sumado al nuevo DT generó que las altas se demoren hasta no tener en claro las necesidades del cuerpo técnico. No obstante lo que sí sufrió Boca Unidos fueron bajas porque algunos jugadores rescindieron sus contratos y otros entraron en el mundo del mercado de pases con grandes posibilidades de migrar a otras entidades.
Jorge Achucarro fue uno de los primeros en no seguir en el Aurirrojo. De hecho el atacante tiene ofertas de Puerto Madryn para sumarse a las filas de Guillermo Brown. El caso de Matías Moisés es diferente puesto a que se venció el contrato y optaron por no renovarle al defensor que no tuvo mucho ruedo durante la era Montero.
El listado de jugadores que se irían de Boca Unidos podría ampliarse porque el ex entrenador uruguayo pidió a Emanuel Olivera para su actual equipo, Colón de Santa Fe. Mientras tanto el nombre de Martín Fabro sonó en Ferrocarril Oeste y el de Franco Cángele en Argentinos Juniors. Así empezó a armar el rompecabezas Labruna pensando en el torneo que se avecina y en el sueño de conseguir el ansiado ascenso a Primera División.
