El Gallego no tuvo más remedio que rendirse ante el podería del único líder que gobierna en la B Metropolitana. Con su libreto, el Camionero derrotó por 4 a 0 al Rojo del Bajo Flores que se hundió en la tabla de los promedios y puso en peligro su permanencia en la categoría mientras que los de Salvador Daniele quedaron a dos pasos del ascenso directo al Nacional.
Barracas Central jugó, una vez más, como quiso. Se floreó, liquidó el pleito en la etapa inicial, y le escondió por completo la pelota a su rival que prácticamente ni molestó a Elías Gómez. Deportivo Español, en una tarde para el olvido, jamás le encontró la vuelta al cotejo frente al puntero del certamen.
En el comienzo de la contienda, la visita quiso pegar de entrada atreviéndose con un intento del ex Platense, Facundo Talín, y un remate desviado de Ernesto Toledo. El resto era todo del dueño de casa que le enrostraba la pelota, tocaba, y llegaba pero no conseguía ese gol coqueto que andaba buscando.
Pasado el cuarto de hora, Barracas Central abrió la cuenta en el Claudio «Chiqui» Tapia. Cristian Broggi desbordó por derecha, envió el centro al corazón del área, Facundo Castro le pifió al remate pero se la dejó servida a Fernando Valenzuela que no perdonó a Tomás Figueroa. El ex Racing, con un disparo seco pero precioso, ubicó el esférico contra la parte interna de la red y anotó el 1 a 0 con el que empezaba a liquidar el asunto frente al Deportivo Español.
Quiso empatarlo el equipo de Eduardo Pizzo por intermedio de un zapatazo de Pablo López desde 35 metros pero al otrora Huracán le faltó puntería y potencia. Mientras tanto, los de Daniele seguían floreándose como una acción que inició Valenzuela en mitad de cancha con un sombrero lujoso, continuó con una asistencia a Luciano Romero y quien supo defender la camiseta Fénix asistió a Juan Pablo Passaglia que probó suerte pero su disparo se fue apenas alto.
El show de Barracas Central no se detuvo. Su joya con la diez en la espalda estuvo cerca de ampliar la diferencia con un intento a colocar y sin ángulo que se fue pidiendo permiso por encima del horizontal. Acto seguido, llegó el segundo tanto de la tarde en el sur de la Capital Federal. Passaglia descargó para Nicolás Minici quien, desde el flanco izquierdo, ubicó la pelota contra el palo más lejano en una definición magistral. Y si algo le faltaba al Deportivo Español para quedar noqueado definitivamente fue la diana de Valenzuela, a los 40 minutos del primer tiempo, que significó el 3 a 0 con una definición como mínimo maradoniana.
La complementaria estuvo de más en Luna y Olavarría. Al Gallego le costó avanzar de tres cuartos de campo hacia adelante y el resto fue del local que tocó, hizo circular la pelota, y cada tanto buscó el cuarto. Passaglia quiso hacerlo con una delicia a colocar que se perdió milimétricamente por línea de fondo. Más tarde Minici de cabeza casi logró el segundo de su cosecha personal. A todo esto, los de Pizzo se quedaron con diez hombres porque Juan Bouvier debió abandonar la cancha por lesión cuando ya se habían hecho todos los cambios. Cuando iban 35, Iván Tapia asistió a Castro quien no pudo contra Figueroa. Ciento veinte segundos después, Valenzuela estampó un tiro libre en el palo, y, cuando Mauro Biasutto no pensaba adicionar, Germán Mandarino de arremetida logró decorar la goleada tras un córner.
Abrazos, festejos, Deportivo Español movió del medio y se terminó el suplicio para un equipo que no salió del fondo de la tabla de posiciones y de los promedios. Barracas Central goleó 4 a 0, jugó una vez más a su antojo, estiró su invicto a 27 encuentros sin derrotas y quedó, cada vez más cerca, del sueño de ascender al Nacional B.