El Camionero logró su quinto triunfo al hilo, mantuvo el invicto en este 2018 y además se coló entre los que al momento estarían clasificando al Reducido. El Candombero cayó por 2 a 0 en Luna y Olavarría, no supo pegar en los momentos que tuvo, y quedó relegado en el sueño del octogonal.
No era tarea fácil para San Telmo. De hecho su racha en este 2018 era completamente opuesta a la de Barracas Central puesto a que llegaba al sur de la Capital Federal con tres encuentros sin victorias. Y claramente, el envión anímico de los hombres de Alejandro Nanía pudo más que las buenas intenciones del elenco conducido por Gustavo Noto.
El dueño de casa se punto en ventaja rápidamente. Germán Mandarino ingresó sin marca y sólo tuvo que tocarla contra la red de Marcos Jara. Iban solamente 18 minutos y el local ganaba 1 a 0 pero, a partir de ese entonces, se despertó la visita y empezó a arrinconar a su adversario contra la meta defendida por Agustín Gómez.
Federico Mateos y Axel Abad trataban de generar algo de riesgo pero el fondo de Barracas Central se abroquelaba ordenadamente. Así San Telmo intentó casi media hora pero tuvo que conformarse con la derrota parcial para irse a los camarines.
Pero el Camionero tenía armas guardadas en su banco de relevos para bajarle la cortina al partido. Cuando Nanía decidió el ingreso de Diego Galeano por Matías Sproat, el ex Boca Unidos respondió con un golazo que incluyó un enganche y un disparo cruzado que se tornó inatajable para Jara.
San Telmo tuvo su momento pero no lo aprovechó. Y dejar con vida a un equipo que viene en racha generalmente se paga caro. Barracas Central supo a lo que jugaba y empezó a lograr el objetivo que se impusieron en la pretemporada. No sólo el equipo de Luna y Olavarría ganó 2 a 0, sino que estiró su invicto a seis juegos y además ya empezó a codearse con los equipos que ingresarían al Reducido.