Fue una lucha. O mejor dicho, como solía mencionar «Carlín» Calvo, es una lucha. Porque al Marrón le cuesta mucho afirmarse en los puestos de Reducido y esta vez consiguió un triunfo de oro para sacar algo de ventaja respecto al décimo puesto. El equipo de César Rodríguez derrotó por 2 a 1 al Monarca que se hunde en los promedios y, en su primera experiencia, marcha rumbo a la desafiliación.
Real Pilar no levanta cabeza y, de hecho, no pudo repetir ese triunfo en condición de visitante ante Argentino de Rosario que le dio algo de oxígeno. Atlas, que no pierde en el Ricardo Puga hace cinco fechas, superó a un oponente que en la previa tendría que haber sido accesible y que, lo terminó siendo, solo a los efectos de la poca resistencia que opuesieron los conducidos por Rodolfo de Paoli.
Los locales fueron más punzantes. El Monarca jamás propuso algo como para llevarse los tres puntos de General Rodríguez y eso que los necesita a como dé lugar. Lo cierto es que Manuel Brandón aprovechó una desatención del fondo visitante y la embocó en el arco defendido por Juan Pablo Ghiglione. Iban 35 minutos del primer tiempo y, partir de ese entonces, empezó a torcerse la historia.
El panorama se complicó para Real Pilar cuando, pasado el cuarto de hora de la segunda parte, Franco Gómez estiró la ventaja. Entre el afán de ir a buscar el empate y los espacios que dejaba, fue Atlas quien sacó provecho. Rápidamente, De Paoli metió mano en el equipo poniendo en cancha al «Papa», Leonel Rodríguez, y también a Hugo Almada que no gravitó en la contienda.
Así como podía sentenciarlo el dueño de casa, tenía alguna esporádica chance la visita. En tiempo de descuento, Jonathan de Otto, le dio un penal al Monarca que Javier Martínez cambió por gol superando la resistencia de Rodolfo de Rosa pero, no habría tiempo para más en el Ricardo Puga, y la batalla quedaría en favor de los locales.
Atlas ganó 2 a 1 y demostró que tiene serias intenciones de pelear desde atrás en el Reducido. El Marrón la lucha y sabe que tras varios años de frustraciones en el umbral del ascenso, alguna vez se tiene que dar. Al menos así demostró actitud en un combate donde los Guerreros le dieron una durísima estocada al Monarca. Y ahora, Real Pilar, está urgido de una victoria que le de esperanzas de no perder la categoría.