Luka Romero cumplió su sueño de ingresar en la Primera de Mallorca y se transformó en el jugador de menor edad en debutar en LaLiga. Nació en México, sus padres son argentinos, tiene 15 años, y es hincha de Quilmes.
Hay futbolistas que pese a sus raíces argentinas no pueden ser vistos en el fútbol local. El caso de Luka Romero es uno de ellos. Si bien el juvenil no nació en estas tierras, sus padres sí lo hicieron y le pasaron su amor por el país. Oriundo de Durango, una ciudad al noroeste de México, Romero decidió desde un primer momento representar los colores albicelestes. Tal es así, que ya ha participado en combinados de la Selección Argentina. Si bien aun está a tiempo de escoger otra nación para representar, dado que ha participado en seleccionados juveniles, el deseo del jugador sigue siendo el mismo.
Junto a Pablo Chavarría, es uno de los embajadores en Mallorca. Y en la derrota 2-0 ante Real Madrid pudo sumar minutos. Con tan solo quince años y doscientos diecinueve días, se convirtió en el jugador de menor edad en debutar en LaLiga. Así, superó a Francisco Bao de Celta de Vigo, que lo había hecho con la misma edad, pero con treinta y seis días de diferencia. Ingresó faltando casi diez minutos para culminar el encuentro en lugar del ghanés Iddrisu Baba Mohammed. Dado que aún no cumplió los 16, el club tuvo que pedir permiso al ente regulador para que lo autoricen a estar.
En el viejo continente, lo comparan con Lionel Messi. De hecho, se dice que es la nueva versión del astro argentino. A diferencia del 10 de Barcelona que es reconocido hincha de Newells Old Boys, Romero fanatiza por Quilmes. O por lo menos así cuentan desde el entorno del jugador. Al igual que su padre, ambos simpatizan por el cervecero.